La educación no sólo va a toda a conseguir metas académicas sino también al desarrollo cognitivo y emocional de los alumnos. Visibilizando entornos educativos saludables.
Muchos centros ya trabajan la empatía, la inteligencia emocional, las habilidades sociales y comunicativas o la gestión de la ansiedad como parte de una educación emocional también necesaria para su desarrollo.